Lo beneficios de los productos probióticos
Los productos con componentes probióticos, aquellos que tienen unos microorganismos vivos, que suponen una buena alternativa natural para mejorar nuestro funcionamiento intestinal, son muy favorables y recomendables su consumo ya desde la infancia. Los científicos así lo aconsejan, como por ejemplo Esther Betoret, investigadora del Instituto Universitario de Ingeniería de Alimentos para el Desarrollo de la Universidad Politécnica de Valencia.
Un equipo de investigación, entre los que se encuentra la doctora Betoret, han experimentado con un aperitivo de manzana con componentes probióticos para aliviar los síntomas que provoca la bacteria conocida como Helicopter Pylori, es una bacteria causante de afecciones estomacales como gastritis y úlceras de estómago.
En el experimento han realizado un test preliminar con niños infectados por esta bacteria. Durante 28 días les dieron a ingerir 40 gramos diarios de este especial aperitivo. Han llegado a la conclusión, aunque los resultados necesitan de una mayor prueba, que en todos los casos se ha visto una mejora en la sintomatología que los niños presentaban, si bien aseguran que no se ha erradicado la bacteria por completo.
El producto con componentes probióticos que crearon para el estudio, un «snack» elaborado a base de fruta y zumo de mandarina, es único en su especie ya que, aseguran, hasta el momento solamente productos líquidos como los yogures y leche fermentadas contenían estos microorganismos.
Representa unos importantes avances teniendo en cuenta que la incidencia de estas dolencias, provocadas por esta bacteria, en los niños de países en desarrollo llega a alcanzar un 90%, mientras que en los países desarrollados esta tasa es menor en la infancia, si bien un 40% de las personas entre los 40 y los 50 años están infectadas, aunque no en todos los casos se produce la aparición de síntomas como son el dolor o molestias estomacales muchas veces unidos al estrés y la ansiedad que cada vez más impregna nuestra vida cotidiana.
